un 2010 /Bogotá 4 estaciones al día

(Foto atardecer Bogotano 4to piso casa de nonó)

Los cambios climáticos hacen pensar que ahora Bogotá es la ciudad de las 4 estaciones al día. Así que la escogencia de ropa se hace con cuatro rodeos: si sirve en la mañana con intenso frio, medio día con tintenso calor, tarde en otoño, onces con primavera o noche con frio de nuevo. Creo que la escogencia se encuentra en la renuncia de una de las estaciones; a mi me gusta el otoño, porque es un poco nostálgico y con mucho movimiento. En esos avatares y sintiendo la ausencia de una de mis estaciones...escribo un nuevo poema que esta en mi ultimo intento de libro ( el tercero ya)


Olor de aliento.

En ocasiones la fantasía rompe los silencios
Es como escribir braille en un cuerpo lleno de ojos sanos.
La hurto…
No hay parte orgánica donde no escriba en mi apetito.
Me entretengo a mis pensamientos indecentes
Sobre lo que dirían todos los fantasmas ajenos a este estruendo.
Y así…
Espaciosamente los transcribo.
Quedan algunos lugares olvidados
Su rostro
Sus manos
Sus pretextos…
y los cubro con palabras.
Me rompo
Perezosamente la leo
Para que los garabatos se mezclen con el agua dulce de una tina seca.
Allí en nuestros silencios hendidos
Es donde le derrito el texto que alucino
Un tono azul
Casi purpura
Ese es el matiz del deseo que siento
Por las letras escritas en su aliento.

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